Si bien no es mi primer escrito, será oficialmente el primero publicado en mi web (pobre, qué papel tan importante tiene).
Pero bueno, arranquemos con quién soy: me llamo María Verónica Ahumada Jaramillo, nací el 12 de septiembre (de un año que no diré) en Cartagena, Colombia. Tengo dos grandes amores: Martina (mi perrita), que es y siempre será el amor de mi vida y EL amor: Joseph. Soy amante de las letras desde que estaba en el colegio, en parte gracias a mi profesora de español, Mariana Pereira de Castro (y escribo su nombre completo porque ella fue muy especial en esos años, lo sigue siendo aunque ahora fuera del aula de clases), y es por eso que estudié comunicación social y periodismo en la universidad de mis sueños: la Universidad de La Sabana.
También estudié pastelería y panadería porque AMO cocinar y soy fiel creyente de que la forma más pura de demostrar amor es a través de la cocina. Además, soy foodie de nacimiento. Soy una mujer multifacética y versátil. He hecho mil cosas y todas muy diferentes: he sido modelo, actriz (por ahí hay un par de vídeos), voluntaria, cocinera, periodista, hasta intenté ser porrista, en fin. Si algo me gusta o me llama la atención, lo hago… o al menos lo intento. No le doy muchas vueltas al asunto.
Me encanta aprender, viajar, leer, cocinar y como ya dije, comer. También me apasiona servir a los demás, me llena el alma y corazón de una manera inexplicable. Llevo varios años intentando ser tan disciplinada con el ejercicio como Sascha Fitness (ja ja ja) y por épocas lo logro, pero se me atraviesa un viaje o un cambio como mudarme a Canadá y se pone en pausa.
Viví en Bogotá cuatro años que recuerdo con mucho amor aunque cada segundo allá, me imaginaba estando en la playa. Llevo en mi corazón los recuerdos, lugares y amigos que me dejó esta reubicación temporal. Los amo profundamente. Pero, tan pronto terminé la universidad, regresé a mi ciudad favorita en el mundo – Cartagena – y ahora, estoy en Canadá.
Sobre esta última mudanza hay mucho que contar así que poco a poco iré abordando mi proceso desde distintas perspectivas. Lo que puedo adelantar es que nunca estuvo en mis planes irme nuevamente de Cartagena y mucho menos a un lugar tan lejano como Canadá. Sin embargo, a pesar de que no ha sido fácil, estoy convencida de que ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida.
En este espacio digital, quiero compartir un poco de lo que soy. Pienso que servirá para acortar distancias y también como catarsis. Aquí podrán encontrar textos muy personales y también información relacionada con mi experiencia canadiense (que sé que a algunos les puede interesar).
Y la razón es que siempre había querido tener un blog o un lugar para publicar mis textos. Un espacio para esas letras que no cumplen con los requisitos de un medio de comunicación tradicional y esos que tengo guardados desde hace años, que no han visto la luz. No me había atrevido porque me preguntaba ¿a quién le va a interesar? O, ¿quién lo va a leer? La respuesta a esas preguntas pasó a un segundo plano porque aunque sólo me lea mi mamá, este es mi proyecto soñado y una de mis más grandes pasiones.
¡Gracias por leerme y bienvenid@s!